Una cama blanda es mucho más cómoda que una cama dura pues se amolda a la manera del cuerpo. No obstante, un molde duro de nuestro cuerpo no nos semeja cómodo, nuestros tejidos son blandos con lo que en el momento en que nos acostamos sobre una área dura se comprimen.
El colchón contribuye a reposar mejor, pero es solo un acompañamiento. Dejemos claro que jamás va a ser la clave ni la contestación a un trastorno musculoesquelético. Bastante gente se confunden con este tema, y es un error grave meditar que la relevancia está en el colchón y después dejar o desatender otras cosas mucho más esenciales. El más destacable colchón es aquel en el que se duerme bien, y acostumbramos a ser seres tan flexibles que seguramente tenemos la posibilidad de reposar bien en colchones blandos o duros. No hay un consenso o defecto que siempre y en todo momento se consigua con relación a la solidez. Disponemos la aptitud de amoldarnos, la cuestión es si duermes bien. Lo idóneo es poder evaluar el colchón del solicitante a lo largo de algunas semanas, antes de decidirse por quedárselo. Has de saber que ciertas fabricantes dejan un periodo de prueba con el colchón, y retiran el colchón si no andas convencido o si no sientes que es el colchón mucho más conveniente para ti. En un colchón siempre y en todo momento se busca la alineación en cualquier situación. Así sea que se acueste boca arriba, boca abajo o de costado, el propósito del colchón es asegurar la alineación correcta de la columna vertebral. La alineación va a venir cierta por una parte por la solidez del colchón (solidez que se cuenta del 1 al diez, si bien en la mayoría de los casos acostumbramos a charlar de un colchón blando, un colchón intermedio o un colchón duro; si bien en este hay uno tiempo). modelo de colchón regulable) y por otra parte hablamos de la situación para reposar (que determinará qué zonas o de qué forma puede padecer nuestra espalda durante la noche y por consiguiente cuál va a ser el colchón mucho más conveniente para llevar a cabo menos daño a la columna).
De entrada, el colchón blando es mucho más conveniente para personas delgadas. ¿Causa? Ya que por el hecho de que van a ejercer menos presión sobre el colchón y por consiguiente menos curvatura. Un individuo mucho más pesada hundiría el medio del colchón como una colchoneta vieja, una situación de reposo bastante mala. El colchón mullido asimismo está correcto para personas que duermen boca arriba o de costado, en tanto que en estas situaciones el arco de la región lumbar hay que completar con el colchón en tanto que se hunde la pelvis, el dorso y la región dorsal, la arco lumbar ha de ser. acompañamiento en el colchón para un óptimo soporte lumbar. El colchón blando va a ser especialmente imprudente para la gente que duermen boca abajo. En el momento en que nos encontramos boca abajo, la región lumbar tiende a arquearse, y si el colchón es bastante blando, esta una parte del abdomen se va a hundir y vamos a tener un arco considerablemente más pronunciado, realizando que la región lumbar padezca pues va a estar mucho más recia. Hay un género de colchón mucho más capaz, y es lo que llamamos un colchón ajustable. Este es un colchón que nos deja mudar el nivel de solidez para amoldar el colchón a los distintos instantes tenemos la posibilidad de cambiar la situación donde dormimos o amoldarnos a nuestras pretensiones (posiblemente tengamos tiempo en el momento en que lo precisemos y sentir que nos ¿Es preferible reposar con un colchón un tanto mucho más estable o decidimos mudar para evaluar lo que mucho más es de nuestra conveniencia).
De qué forma elegir si precisas un colchón estable o blando
En el momento en que nuestra columna está en su situación natural, el cuello, la espalda media y la espalda baja están ajustados. Esto quiere decir que los pulmones tienen la posibilidad de absorber mucho más oxígeno, acrecentar la circulación y calmar el mal articular y muscular.
Dureza, consistencia y solidez: tres términos distintas que no tienen que confundirse
Si bien por norma general charlamos de colchón duro en el momento en que nos semeja bastante recio, la verdad es que en ocasiones se intercalan los términos y, en el momento en que mencionamos abultado, hablamos de dureza, en el momento en que de todos modos son puntos que nada tienen relación. La consistencia está relacionada con la calidad del colchón, refiriéndose a la proporción de material usado por metro cúbico, lo que da mayor durabilidad al colchón al eludir la pérdida de solidez.
Por su lado, solidez es el término empleado para determinar la sensación que se genera al tomar contacto con el colchón.
Se tienen presente los escenarios de compresión, el nivel de soporte, etcétera.
Hace unos años se pensaba que los colchones duros eran mejores para proteger nuestra espalda y eludir dolores, pero en este momento se demostró que la decisión de un colchón duro o blando es dependiente completamente de cada individuo y sus pretensiones. Esto no quiere decir que la resolución de un colchón duro o blando deba ponerse un límite a sencillos opciones personales, en tanto que el colchón equivocado puede ocasionar una mala alineación del cuerpo, lo que con el tiempo se va a traducir en afecciones musculares.
Ahora hemos dicho más de una vez que no es exactamente lo mismo dureza que fuerza. La dureza la da el acolchado, al paso que el núcleo da la fuerza. Por consiguiente, tienen la posibilidad de existir colchones firmes que paralelamente sean agradables merced al acolchado que lo cubre.
Asimismo es esencial que tengamos claro que actualmente no hay un colchón duro o blando en su grupo. ¿Qué significa esto? Que hay distintas grados de solidez donde tenemos la posibilidad de escoger y, en dependencia de la composición del núcleo y la consistencia de los materiales usados, así sea espuma, látex o muelles, vamos a tener diferentes recepciones, pero jamás un colchón plus blando o uno que semeja una mesa.
El más destacable colchón para el mal de espalda: géneros de colchones según la solidez
Un óptimo colchón es la base para un reposo de calidad, aparte de eludir el mal de espalda. La clave para seleccionar un colchón para el mal de espalda es seleccionar el que se ajuste de manera perfecta a tu fisiología, para esto tienes que tomar en consideración las peculiaridades que te hemos explicado en el punto previo. En este momento, qué diferencia con cada género de colchón. Te enseñamos sus peculiaridades a fin de que halles el más destacable colchón para el mal de espalda:
Jergones de muelles: Son mucho más resistentes y no ceden a la presión. Es un colchón sugerido para personas con figuras mucho más enormes o personas con sobrepeso. La solidez de este colchón es superior al resto, esto se origina por las distintas capas que cubren los muelles y su resistencia.
Jergones de espuma HR: Son colchones fabricados con espuma de Alta Resiliencia. Son colchones que aportan una solidez media. Por consiguiente, se transforma en una alternativa muy aconsejable para los que duermen de lado y para los mayores que no tienen sobrepeso. Los colchones de espuma HR proponen menos transpiración que los colchones de muelles.
Jergones de látex: Los colchones de látex son entre las opciones mucho más recomendadas para personas con inconvenientes de mal de espalda. El fundamento es que dan un increíble nivel de unión merced a la flexibilidad natural del material. Esto afirma una homogeneidad y un satisfactorio confort al emplear este producto. Este colchón tiene una solidez media.
Colchón viscoelástico: Se puede añadir viscoelástico a los colchones de muelles ahora los colchones de espuma HR. Es una alternativa muy habitual. En dependencia de la proporción de espuma viscoelástica que se añada al colchón, puede ser de solidez media o baja.La espuma viscoelástica está desarrollada para achicar los puntos de presión en la espalda y las piernas. Se están transformando en una alternativa muy aconsejable para personas mayores que pasan bastante tiempo en cama por inconvenientes musculares o articulares. Además de esto, este género de colchón absorbe realmente bien los movimientos, con lo que son aconsejables para camas de matrimonio.
